Las noticias más antiguas se datan a finales del siglo XV, y se corresponden con la traza actual conservada, de tres naves de estilo mudéjar tardío. Se documentan diversas obras entre los siglos XVIII y XIX, en relación con el estado de ruina del edificio, entre otros motivos por el terremoto de Lisboa de 1755.
Tras el golpe de estado de 1936 y la subsiguiente reacción popular, la iglesia fue incendiada, perdiéndose las cubiertas, posteriormente restauradas. En su interior se conservan diversos objetos litúrgicos e imágenes de interés.